NASA confirma tendencia de calentamiento climático a
largo plazo
22 de enero de 2013: Científicos de la
NASA afirman que 2012 fue el noveno año más caluroso, desde 1880, lo cual
continúa la tendencia de aumento de temperaturas globales a largo plazo. Con
excepción de 1998, los nueve años más calurosos en este registro, el cual
abarca los últimos 132 años, ocurrieron desde 2000, siendo 2010 y 2005 los años
más calurosos.
El Instituto Goddard para Estudios
Espaciales (Goddard Institute for Space Studies o GISS, por su acrónimo en
idioma inglés), de la NASA, ubicado en Nueva York y encargado de monitorizar
las temperaturas superficiales globales de manera continua, publicó el pasado
martes un análisis actualizado que compara las temperaturas alrededor del mundo
en 2012 con el promedio de temperaturas globales que se registró alrededor de
mediados del siglo XX. La comparación muestra que la Tierra continúa
experimentando temperaturas más cálidas que las que se registraron hace varias
décadas.
Este mapa codificado por colores muestra la evolución de anomalías en las
temperaturas superficiales globales desde 1880 hasta 2012. El último cuadro
representa las anomalías en las temperaturas globales promediadas desde 2008
hasta 2012.
La temperatura promedio en el año 2012 fue
de alrededor de 14,6 grados Celsius (58,3 grados Fahrenheit), lo cual es 0,6 °C
(1,0 °F) más caliente que la referencia que corresponde a mediados del siglo
XX. Según el nuevo análisis, la temperatura global promedio ha aumentado 0,8 °C
(1,4 °F) desde el año 1880.
Los científicos hacen hincapié en que los
patrones climáticos siempre causarán fluctuaciones en la temperatura promedio
de un año a otro, pero el constante incremento en los niveles de gases de
efecto invernadero en la atmósfera de la Tierra asegura un aumento a largo
plazo en las temperaturas globales. No será cada año necesariamente más
caluroso que el anterior pero, dado el patrón actual del incremento en los
gases de efecto invernadero, los científicos esperan que cada década sucesiva
sea más calurosa que la anterior.
"Tener un año más de datos no es en
sí significativo", dice Gabin Schmidt, quien es un climatólogo del GISS.
"Lo que importa es que esta década es más calurosa que la anterior y esa
fue, a su vez, más calurosa que la que le precedió. El planeta se está
calentando. La razón por la cual se está calentando es porque estamos
inyectando en la atmósfera cantidades de dióxido de carbono cada vez mayores".
El dióxido de carbono es un gas de efecto
invernadero que atrapa el calor y también es uno de los principales agentes que
controlan el clima en la Tierra. Aunque se produce naturalmente, también es
emitido cuando se queman combustibles fósiles con el fin de producir energía.
Debido a las crecientes emisiones causadas por el hombre, los niveles de
dióxido de carbono en la atmósfera de la Tierra han estado continuamente en
aumento durante varias décadas.
El nivel de dióxido de carbono en la
atmósfera era de 285 partes por millón, en 1880, el año en que se inició el
registro de temperatura del GISS. Para 1960, la concentración de dióxido de
carbono atmosférico, medida por el Observatorio Mauna Loa de la NOAA (National
Oceanographic and Atmospheric Administration o Administración Nacional
Oceanográfica y Atmosférica, en idioma español), era de 315 partes por millón.
En la actualidad, esas mediciones superan las 390 partes por millón.
Mientras que el planeta experimentaba
temperaturas relativamente más cálidas en 2012, el sector continental de
Estados Unidos soportó el año más caluroso, por mucho, del cual se tenga
registro, según indica la NOAA. Dicha entidad es el organismo que se ocupa
oficialmente de los registros climáticos de Estados Unidos.
Los conjuntos de datos recolectados por la NASA y por la NOAA proporcionan
confirmaciones independientes de la reciente tendencia de calentamiento. [Más datos]
"Las temperaturas registradas en
Estados Unidos durante el verano de 2012 son un ejemplo de una nueva tendencia
de extremos estacionales anormales que son más calurosos que las temperaturas
estacionales más altas registradas a mediados del siglo XX", dice el
director del GISS, James E. Hansen. "Los dados del clima están ahora
cargados. Algunas estaciones seguirán siendo más frías que el promedio a largo
plazo, pero las personas perceptivas deberían darse cuenta de que la frecuencia
de extremos inusualmente calurosos está aumentando. Son los extremos los que
tienen el impacto más grande sobre las personas y otras formas de vida en el
planeta".
El análisis de las temperaturas producido
por el GISS se realiza tomando como base los datos climáticos proporcionados
por más de 1.000 estaciones meteorológicas alrededor del mundo así como por
observaciones satelitales de las temperaturas superficiales de los océanos y por
mediciones realizadas por estaciones de investigación ubicadas en la Antártida.
Un programa que se encuentra disponible públicamente se usa entonces para
calcular la diferencia entre las temperaturas superficiales de un mes
específico y el promedio de temperatura en ese mismo sitio en el período desde
1951 hasta 1980. Este período, el cual abarca tres décadas, se utiliza como
punto de referencia para el análisis. El último año que experimentó
temperaturas más frías que el promedio desde 1951 hasta 1980 fue 1976.
El registro de temperatura del GISS es uno
de varios análisis de temperaturas globales, junto con aquellos producidos por
la Oficina Met del Centro Hadley, en el Reino Unido, y por el Centro Nacional
de Datos Climáticos, de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica, en
Asheville, Carolina del Norte. Aunque estos tres registros primarios emplean
métodos levemente diferentes, sus tendencias muestran, en términos generales,
una estrecha concordancia.
Créditos y Contactos
|
|
Funcionaria Responsable de NASA: Ruth Netting
Editor de Producción: Dr. Tony Phillips |
Traducción al Español: Juan C. Toledo
Editora en Español: Angela Atadía de Borghetti Formato: Juan C. Toledo |
Más información (en inglés)
Este texto ha sido dado a conocer como la
publicación No. 13–021 de la oficina central de la NASA.
No hay comentarios:
Publicar un comentario